22 mar 2010

Nutilim Militun Draconda (2)

Levanto la mano en medio de aquella multitud sin importarle en lo más minimo las miradas de sorpresa e indignacion que le lanzaban, ya estaba acostumbrado a ellas. El hombre que estaba sobre el estrado lo miró y dejó de hablar, sacó su mano de la gabardina café que usaba para señalar aquella mano de ahogado en el mar de gente. Esa era la tercera vez que el pueblo se reunia en la plaza principal. Todos los presentes habian ido mas que por la causa, por la curiosidad de observar a aquel exiliado que le había hecho frente al rey. Todas las mujeres se ponian sus mejores vestidos y colgijos con la esperanza de que aquel hombre de mirada triste posara sus ojos en ellas. Aquello parecía mas un carnaval que una reunión de guerra. Entonces todos volvieron la mirada hacia el hombre extraño que levantaba la mano, como si acabase de aparcer de la nadad junto a ellos. El hombre de la gabardina lo mirón con una expresión grave.

-Si, el del sombrero. - El hombre del sombrero al ver que su llamada de atención había funcionado, bajo lentamente la mano, sabiendose ahora escuchado por todos. Su sombrero ancho con plumas de pavorreal en la punta hacia imposible observar su rostro. Una sonrisa maliciosa se dibujo en aquel hombre. Llevaba una levita gastada, y unos pantalones que apenas se sostenian en su cintura, como rasgados por los pumas y escupidos tres veces por los osos. Daba pena. Todos se alejaron de el, cual leproso moribundo.

-Usted que se dice libertador del pueblo, usted que proclama palabras de justicia, usted que busca el bien para todos, digame, por favor, ¿Cuando fué la ultima vez que estuvo en Italia?.-
Toda la gente se volvió hacia el expositor de la gabardina café, que ahora tenía cara de haber recibido una estocada en el estómago. Tal vez así era. Sonrió y bajó la cabeza, el teatro había terminado y los dos lo sabían. Se quedó ahi inmovil sin decir palabra, mientras todos obsevaban el siniestro espectáculo. La gabardina comenzó a moverse por si sola, como empujada por una fuerza invisble. Un bulto se empezó a formar en la esplada de aquella creatura, por que definitvamente hombre había dejado de ser. Todas las mujers al ver aquella abominación entraron en pánico, y como gallinas culecas se fueron dispersando por todo el campo, cargando con sus hijos como sacos de papa, incluso a algunos de los pies, pues correr era mas importante. La gabardina había caido para dejar lugar ahora a dos grandes y espeluznates alas de metro y medio de envergadura cada una, eran negras y escamadas por la parte interna, que terminaban en picos de un negro profundo. El hombre del sombrero había comenzado a brillar con una extraña luz blanquecina, iluminando todo a su alrrededor. Sostenía un báculo en su mano derecha, y con su izquierda mantenía una posición extraña con los dedos, minetras susurraba algo inteligible. Unos ojos rojo intenso le lanzaban una mirada asesina, mientras que la lengua bífida acaricibia los colmillos sedientos de sangre. Ahora el enfrentamiento era inevitable, todo lo que restaba era saber quien atacaria primero.

18 mar 2010

Nutilim Militun Draconda (1)

Caminaban sin rumbo fijo. Sus harapos eran evidencia de lo que habian pasado, tenian escrito en la cara "hambre" y "odio". Este ultimo en mayor intensidad, incluso con sangre. Pero sus ojos decian otra cosa muy distinta: Venganza y sed de sangre. Eran dos. Uno ligeramente mas pequeño que el otro. Caminaban por un sendero enterregado por enmedio del bosque en direccion opuesta del sol, haciendo que se proyectaran espectros deformados de ellos mismos. El mas pequeño tenia clavada la mirada en el camino, como quien ya no tiene nada por que seguir viviendo, y asi era. El mayor caminaba de igual manera, pero lo que el veía no era el piso, sino su propia sombre, y mas que su sombra, las dos protuberancas que sobresalian de su cuerpo, haciendo que su silueta se distorcinara de forma extraña. Simplemente no estaba acostumbrado a eso. Los pies les dolían con cada paso que daban, era como caminar sobre agujas al rojo vivo, pero eso no era nada, ya habían conocido el verdadero dolor y aquello no los detenía. Entonces el mayor de repente se desplomó, tocandose la espalda y gritando fuertemente de dolor.

- ¡Hermano!, ¡Hermano que te pasa!, ¡¿Que tienes hermano?!- le gritaba el mas pequeño mientras lo asia del brazo y lo agitaba. Su mueca de dolor fue desaparenciendo lentamente, pero se quedo ahí, tumbado, respirando regularmente con la cara en el suelo. Sabía por lo que estaba pasando, ya lo había visto en otros antes, y sabía que podía ser muy doloroso, incluso mortal, pero en ese momento no podía morirse, no ahora, por eso se aferraba fuertemente a la vida, con todas sus fuerzas. Se levantó lentamente bajo la mirada de miedo de su hermano pequeño. Lo tomó por los hombros:

-No te preocupes, todo va a estar bien- Hizo todo lo posible por sonreir. Varios colmillos se asomaron de aquella boca habmbrienta en forma de sonrisa. Sabía que tenía que mantener la calma, puesto que ahora era quien tendría que cuidar de su hermano y no queria que se preocupara por él. Solo se tenian el uno al otro.

11 mar 2010

Giova

¿Y quien te crees para causar desasón?
¿Por que me envenenas con palabras de amor?
¿No sabes que estoy dolido del corazón?
No sigas, querido mio, no sigas por favor.

¿Sera que me gusta el dolor?
O acaso deje de ser cuerdo,
¿Quisiera sentir tu calor?
O simplemente no lo recuerdo.

Lo peor es que me gustas
me gustas por que sí
no quiero hacerte preguntas
solo amarte, amarte así.

Asi que dime, dime mi amor
¿por que me haces esto
y me niegas tu calor?

Si tus besos me mataran
ya hubiese muerto de amor
si tan solo se compraran
dame todos por favor.


Pero sigueme hablando
embriaga a mi corzón,
que te estoy esperando,
esperando en mi balcón.

Si algun día te encontrara
jamás te dejaría
aunque al intentarlo me matara
por siempre te amaría.

Asi que dime, dime mi amor
¿por que me haces esto
y me niegas tu calor?

5 mar 2010

De ser Tico

He nadado muchas veces en mundos de incoherencias,
en realidades reflejadas sobre espejos de cartón.
Todo lo que llama a la puerta
viene acompañado de ideas pasajeras
que matizan una noche de luna sin estrellas.

Acrecentar la realidad cambia el mundo escurridizo
que alberega el sentir de un alma de limón.
Comer, reir, hacer, y cantar en un dia sin cielo
hace que las nubes parezcan de papel.
Brinca a los mares de arena salpicados de locura,
solo así podras descubrir el oasis en mi corazón.

4 mar 2010

Ser o no ser?

La vida es luchar por ser feliz, ser feliz es ignorar todo lo malo que nos pasa, todo lo malo que nos pasa se debe a la sensación que causa los impulsos electroquímicos de nuestro cerebro, la química es la ciencia que estudia los elementos, elementos es de lo que esta hecho todo en el universo, el universo es infinito, infinito es a donde vamos, la nada es donde venimos, es decir del no ser para pasar al ser y de nuevo al no ser. Dos negaciones es una afirmación, entonces para afirmar nuestra propia existencia hay que dejar de ser. Al vivir eternamente se deja de ser, se niega la vida. Así pues para ser hay que dejar de ser.